lunes, 6 de febrero de 2017

Carne a la manzana con puré de papas

Hoy desde los fogones de Palomeque nos llega una elaboración de estilo alemán a la cual nosotros hemos modificado a nuestro gusto culinario, lo más significativo es que hemos cambiado la carne de cerdo por ternera ya que tiene menos grasas y reconocemos que la de cerdo queda más jugosa al paladar, incluso se puede hacer con pollo o pavo que aún tiene menos calorías. 









Los ingredientes necesarios son:


  • 500 g de carne de ternera picada
  • 2 manzanas golden
  • 1 cebolla mediana
  • 2 vasos de zumo de manzana
  • Vino blanco
  • Pimienta 5 bayas
  • Jengibre en polvo
  • Sal de espuma
  • Aceite de oliva
  • Puré de papas



Comenzamos por sancochar las papas con piel para posteriormente preparar el puré de papas, para ello ponemos 5 papas medianas con piel previamente lavadas a hervir en un caldero. Mientras empezamos a elaborar la carne, para ello en una sartén pochamos la cebolla cortada en brunoise, después añadimos la manzana cortada del mismo modo que la cebolla y una vez todo pochado, agregamos la carne picada y con la ayuda de una espátula la vamos desmenuzando, rehogamos un poco y añadimos un buen chorro de vino, esperamos a que el alcohol evapore, recordamos el truco para saber cuando ha evaporado, cuando al oler la elaboración, no nos pique la nariz. Seguidamente añadimos las especias a nuestro gusto y después el zumo de manzana. Dejamos que todo hierva a fuego medio para que vaya evaporando el zumo de manzana y se concentre el sabor. Llegado a este punto, sazonamos con la sal. Mientras el fuego termina de hacer su trabajo, vamos a elaborar el puré de papas con las papas que previamente habíamos puesto a hervir y ya hemos pelado. Pasamos las papas por un pasapuré, añadimos un huevo entero, una cucharada de mantequilla, un poco de leche, nuez moscada y sal, para hacer que el puré quede fino y cremoso, ponemos el caldero con todo al fuego hasta que veamos que todos los ingredientes se fusionan, dejando un fino puré. Una variante para el puré de papas puede ser, añadiendo un poco de queso rallado. Ya solo queda servir y lleva a la mesa.

domingo, 5 de febrero de 2017

Fideuá de verduras al curry

Hoy presentamos una receta fácil de elaborar con las verduras que encontremos en nuestro frigorífico o de temporada. En mi fondo de armario me gusta tener curry, una mezcla de especias que tiene su origen en la India, cúrcuma, cardamomo, pimienta, comino, jengibre en polvo, semillas de cilantro y canela... son los principales ingredientes. Se dice que hay tantos currys como gente que se atreva a elaborarlo ya que cada uno le da su toque personal con los porcentajes a su gusto de la mezcla con el resultado final de su sabor característico, en definitiva no hay dos iguales.








Los ingredientes necesarios son:


  • Fideos cabello de ángel
  • 1 calabacín
  • 1 zanahoria
  • 1 cebolla
  • 1 pimiento verde
  • 1 pimiento rojo
  • 2 dientes de ajo
  • Guisantes
  • Curry
  • Vino blanco
  • Caldo de verduras
  • Grana padano o queso curado rallado
  • Aceite de oliva
  • Sal de espuma



Comenzamos por lavar y picar toda la verdura en brunoise o cuadraditos sin mezclar y reservamos, el caldo de verduras nosotros lo teníamos ya elaborado y lo calentamos para añadirlo caliente y no cortar la temperatura de cocción. En una sartén ponemos a pochar el ajo y la cebolla, después vamos añadiendo las verduras por su orden de dureza... pimientos, zanahorias y calabacín. Dejamos que todo vaya pochando lentamente, cuando lo tengamos pochado, añadimos una cucharada sopera rasa de curry y lo rehogamos todo un poco. Llega el momento de añadir los fideos, yo suelo poner dos puñados por persona (medida de madres) y también le doy unas vueltas antes de añadir un chorro de vino blanco para posteriormente acabar con el caldo y los guisantes. La medida del caldo es cubrir los fideos y las verduras, sazonar y probar. Ya solo queda esperar a que los fideos se hagan mientras absorben el caldo. Una vez terminada la elaboración, rallamos el queso antes de llevar a la mesa.


sábado, 4 de febrero de 2017

Coca de jamón york y champiñones

Desde el HORNO ON FIRE de Palomeque mi hermana Sonia me hace llegar esta elaboración, la coca, la pizza española que tiene su origen en la zona del mediterráneo español. En este caso, la coca crea la misma controversia que la pizza o la paella en lo referente a que ingredientes son los originales de la receta según los puristas, lo que si tengo claro es que si tú lo haces con cabeza y le pones el ingrediente secreto para cada elaboración, que es el cariño, el éxito está garantizado. Lo de cabeza lo comento porque no todo vale a la hora de hacer mezclas y en algunos casos los hay muy temerarios que no saben medir las consecuencias del resultado final.






Los ingredientes necesarios son:

  • 1 plancha de masa para empanada o coca
  • 1 rulo mediano de cabra
  • 250 g de jamón york
  • 150 g de champiñones frescos
  • 1 cebolla grande en juliana pochada
  • 200 g de nata líquida
  • Pimienta cinco bayas
  • Nuez moscada
  • Sal de espuma
  • Aceite de oliva


Comenzamos por precalentar el horno a 200ºC y picar en juliana la cebolla para después ponerla a pochar en una sartén con un poco de aceite de oliva y sal. Laminamos los champiñones después de limpiarlos con una servilleta, cortamos en cuadros el jamón york y en rodajas no muy finas el rulo de queso de cabra y todo esto lo reservamos. una vez pochada la cebolla, la ponemos en un colador para quitarle el aceite sobrante. Mientras la cebolla suelta el exceso de aceite, vamos estirando un poco la masa con la ayuda de un rodillo. una vez extendida la ponemos en la bandeja sobre un papel de horno el cual suelen traer todas las masas preparadas. Ya solo nos queda ir disponiendo los ingredientes encima de la masa, dejando para el final el queso de cabra y la nata, la nata la distribuimos en forma de hilo abarcando toda la elaboración. Una vez que todos los ingredientes los tenemos sobre la masa ya solo queda sazonar con la pimienta, la nuez moscada y la sal. Metemos en el horno durante 25-30 minutos, hasta que veamos que todo queda de un color dorado y apetecible.